Fiat Chrysler retirará cerca de 700,000 SUV en todo el mundo, porque una conexión eléctrica defectuosa podría evitar el arranque del motor o contribuir a una parada.
El fabricante de automóviles de Detroit había retirado previamente la mayoría de los mismos SUV en 2014 y 2015 por problemas con sus relés de bomba de combustible.
La FCA dijo en un comunicado, que este retiro que cubre los SUV ‘s Dodge Durango y Jeep Grand Cherokee del 2011 al 2013, abordará los depósitos de silicio en los puntos de contacto de los relés de la bomba de combustible que pueden interrumpir la corriente eléctrica.
El comunicado dice que el retiro incluye alrededor de 528,500 vehículos en los Estados Unidos, 34,700 en Canadá, 18,100 en México y 116,500 fuera de América del Norte.
La automotriz dijo que no tiene conocimiento de ninguna lesión o accidente relacionado con el defecto.
La compañía, que el mes pasado anunció que planeaba fusionarse con el propietario de Peugeot, PSA, dijo que notificará a los propietarios en una fecha posterior cuando puedan programar reparaciones en los concesionarios.